Mi querido hermano, tu eres lo más hermoso que la vida me regalo, porque llevamos la misma sangre en las venas y el mismo amor, yo te acepto como eres, porque en tus ojos veo la alegría de mis padres, y en tu sonrisa, la silueta de tu existencia, la que me hace feliz, aunque yo no puedo darte soluciones a tus problemas de la vida, ni a tus dudas, que te hicieron que caminaras por un camino de tristeza, no olvides que soy tu hermano y que te quiero mucho, que yo limpiare todas las lagrimas que aparezcan en tus ojos como perlas de soledad y de amargura.
Yo siempre estaré a tu lado, y te oiré todos tus temores, y le pediremos a la misma vida, que el distanciamiento más largo lo hagamos con besos y abrazos, y todos los problemas que nos pueda traer la propia vida, los afrontemos juntos como dos hermanos, porque la vida es preciosa, y no la dejemos ir como el viento, riamos, saltemos, gritemos, y lloremos ! y seremos como dos pájaros que surcan los cielos entre las nubes inmaculadas, para que todos los malos recuerdos, que te ha dejado la vida, los dejes atrás y podamos empezar una nueva vida.
Mi querido hermano, toma mi mano y busquemos la felicidad que nos espera.
Tu hermano, siempre se acuerda de ti. Aun estando en tu obligado trabajo, aquí en tu pueblo, no se te olvida, menos aun, en estas fechas tan señaladas y esperadas para los Castellariegos. Fecha de regocijo y de amar nuestra pasión que tanto nos une por la fiesta del mundo del toro. Siempre en mi mente, en la de toda tu familia, y los que te quieren y aprecian…
Decirte de darte un beso o abrazo… se me queda corto para despedirme de estas palabras hacia ti… ¡ahora sí, hermano!, te espero, te esperamos pronto pero, ¡eso sí!, como siempre fuiste, como lo que hoy por hoy eres… una gran persona.
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