SANCHO DÁVILA, SE ESTRELLA EN SU MISMA TIERRA CON UN GANADO QUE LA BRAVURA SE LE FUE POR EL SUMIDERO.

SANTISTEBAN DEL PUERTO, EN SU CORRIDA COLOSAL, SIN GANADO Y CON UNA PRESIDENCIA DEMASIADO FLEXIBLE.

Ayer día 27 de mayo del 2012 se esperaba la gran corrida de toros de la primera feria de la provincia de Jaén, pero como bien digo, tan solo se estuvo esperando. Diego Ventura, Juan José Padilla y el torero de la provincia José Carlos Venegas se encontraron con un Ganado que pasta en el término de este mismo pueblo de Santisteban del Puerto, totalmente, rajado, manso y con la fuerzas muy, pero que muy medidas; aunque de presentación para esta plaza de toros, perfecta. Me refiero a la ganadería anunciada en el cartel de esta corrida de Dº Sancho Dávila, la cual pasta en la finca de Puerto Laca.

El rejoneador Diego Ventura, supo aprovechar los arreones de genio que tuvo su primer oponente, exhibiendo su cuadra ecuestre como de costumbre, toreando con la grupa de los caballos. Ventura, no es que se hubiese entregado en su faena del primer toro, pero cierto es que deleito al público con toreo exquisito, llevando a uno de sus caballos toreando al toro con el costado, y pegado a tablas llegando a darle la vuelta al ruedo con un toreo templado y muy de cercanías. En su segundo, no nos dijo mucho el rejoneador, unos quiebros a la hora de reunir las banderillas y poco más; se juntaron las pocas ganas de querer hacer las cosas bien y el animal que estuvo desde que salió por la puerta de chiqueros aculado a tablas. En sus dos toros mato de estocadas después de pincharlos.

Juan José Padilla, estuvo toda la tarde con sus pensamientos en otro lugar. No llego acoplarse con sus oponentes; con su primer toro, no quiso ni verlo, se le quedaba corto por los dos pitones y aunque el toro demostró en toda su lidia nobleza, Padilla anduvo por allí y sin emotividad alguna. En su segundo de lidia, el diestro dio la sensación de querer quitárselo cuando antes, un toro muy rajado y sin apenas recorrido en sus embestidas, aunque ya advierto al publico soberano, que como figura del torero que el diestro Padilla se proclama, si el toro no embiste, tiene que embestir el matador y más en una plaza de pueblo y de tercera categoría que con cuatro alardes que se hubiese hecho, se habría llevado al publico a su terreno. En banderillas; demasiado descarado los subalternos, no se le despegaban de él matador ni a cal ni a canto. El público no es tonto y se dio cuenta que Padilla, aunque físicamente y mentalmente está bien, pero su deficiencia de su último percance lo estuvo acusando durante toda la tarde. Sin ánimo de ofender a nadie y menos a diestro Padilla, pero la mayoría de la gente y público que anduvo a mi lado en plenas faenas del diestro, la sensación que un servidor recogió fue: Pura compasión hacia el Matador de Toros. Con las espadas estuvo desafortunado, mato a sus dos toros de estocadas bajas tras demasiados pinchazos.

José Carlos Venegas torero de la provincia, no se difine con su toreo o el camino que quiere adoptar como tal, no termina de romper como torero y acaba aburriendo al tendido, más bien parece que torea acomodado. Su primer toro estuvo demasiado parado aunque en varas se le cuido hasta el punto que apenas se le marco la puya, en su segundo oponente de la tarde Venegas recibiéndolo con un toreo a la verónica, el toro le sorprendió con el pitón derecho dándole una desafortunada voltereta sin mayores consecuencias. En la faena de muleta intento torear a pies juntos y desmayando la figura, pero Venegas volvió a encontrarse con un toro que sin tener peligro pero, estaba demasiado parado con la consecuente de que el diestro lo único que podía hacer era pegarse un arrimón de los que ya nos tiene este torero acostumbrados –porque a este torero si algo le sobra es valor-, el público le protesto en varias ocasiones por alargar sus dos faenas de tiempo. Venegas en su primer toro lo mato por todo lo alto de una estocada después de pincharlo; en su segundo de la tarde, estocada algo caída muriendo el toro en la puerta de chiqueros tras un descabello acertado.

El palco presidencial estuvo presidido por el alcalde de la localidad, Dº Juan Diego Requena Ruiz; la presión ocasionada por parte del sector del público asistente y la presión del cartel de toros, hizo que desbocara la tarde con algunos de los trofeos concedidos. Es triste salir a la calle, sentir de boca en boca que la corrida de toros no ha valido para nada, que los toreros no han estado a la altura que se merecía la plaza y la localidad, aun sin tener al frente un ganado cualificado para ello, y ver que los tres diestros han salido por la puerta grande. Quizás ahora hagan más daño los medios de información correspondientes a esta feria, a su localidad y como no, a la presidencia junto con sus asesores, que si de verdad se hubiesen hecho las cosas como se debiesen hacer, se quitarían de estas incomodidades que ahora deben de soportar; mas bien hubiesen tomado nota como lo supo hacer un día antes en la novillada el palco, del cual deberían de tomar ejemplo muchos de los presidentes de los que se suben a un palco pensando que eso es, dar orejas porque no cuesta nada darlas, estando al frente de la presidencia Dº Javier López Vela.

RESULTADO DEL FESTEJO:

Santisteban del Puerto (Jaén). Tres cuartos de plaza. Toros de Sancho Dávila, de correcta presentación. Flojos, mansos y desrrazados. El rejoneador Diego Ventura, dos orejas y oreja; Juan José Padilla, dos orejas y ovación con saludos; José Carlos Venegas, oreja y oreja tras aviso.

La mayordomía; Tradiciones…




















Buena presentacion del ganado.

El presidente del festejo sabe que ha estado desafortunado…
Gran ambiente en los aledaños de la Plaza de Toros
Juan Collado y Juan Palomares (Hijo)