Esto lo redacta Ángel Berlanga, corresponsal de la revista Aplausos y Presidente de Tendido joven de Valencia. Tendido joven es un grupo amplio de gente, como bien dice la palabra, joven, aficionada a la fiesta nacional del toro y sobre todo con proyecto para apoyar a dicha fiesta, la cual me acogieron en estas fiestas taurinas de julio en Valencia, como uno más de tantos, “gracias” por esa acogida que me tuvisteis tan grata y acogedora.
(Palabras redactadas por Ángel Berlanga)
En ocasiones las noticias, no por esperadas, dejan de ser sorprendentes. Cuando me comunicaron tu fallecimiento, don Ramón, no pude más que sentir un hondo pesar. En ese momento fui consciente de que ya nunca más podría volver a hablar de toros contigo. Y eso, amigo, duele...
Parece que fue ayer cuando me presentaron, en un céntrico hotel de Valencia, siendo yo un chiquillo, ‘al aficionado más longevo de la ciudad’. Noventa y tantos años debías tener por aquel entonces. Y yo apenas una quincena. Veteranía y juventud, experiencia y ganas de aprender, se dieron la mano desde ese mismo instante.
Tu ingenio e inventiva me cautivaron desde el principio y siempre perdurarán en mi memoria, igual que tu figura, ubicada en una contrabarrera de sombra de nuestra querida plaza valenciana. Tardaré en olvidar aquella mañana fallera en la que juntos presenciamos el triunfo de un novillero extremeño llamado Miguel Ángel Perera. ‘Será figura’, me dijiste. Y no te equivocaste…
Tampoco puedo dejar de recordar esos días de lluvia en los que, con toda la afición buscando un refugio, tú aguantabas estoico, tapándote la cabeza con una almohadilla, en tu localidad de siempre. ¡Y cómo olvidar aquel brindis que te dedicó Enrique Ponce, tu torero, seguido de la atronadora ovación de la afición de tu tierra! Por no hablar de tus frustrados intentos por ser torero… ¡Esas historias sí que no tenían precio!
Muchos recuerdos se agolpan en mi memoria sobre ti. ¿Te acuerdas de aquellas interminables charlas que manteníamos sobre la Edad de Oro del Toreo, esa que tuviste ocasión de conocer? Me decías que Joselito fue el más grande, pero que Granero aún iba a ser mejor. Me confesabas que viste hablar a los toros, como si les susurrara, al genio y trianero Juan Belmonte. Y me asegurabas que, como se toreaba hoy, no se había toreado nunca. Que el toro de antes podía ser más emocionante, pero que el más bravo de todos los tiempos era el que se lidiaba en la actualidad...
Para mí siempre fuiste una fuente de sabiduría taurina, un mar de recuerdos que supiste transmitir. Ahora, a una semana de cumplir los 105 años, nos has dejado. No debemos estar tristes, al revés, debemos alegrarnos por haber podido gozar tantos años de tu presencia. Donde quiera que estés, supongo que en el cielo, que es donde van los hombres de bien, descansa en paz. Aquí, en la tierra, no te olvidaremos.
Nota:
Ramón Aliaga, natural de la localidad valenciana de Benifayó, falleció el 24 de agosto de 2010 a los 104 años de edad.
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