TOROS DEL CONDADO S.L

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martes, 25 de enero de 2011

FALLECE EN ACCIDENTE DE TRÁFICO EL MATADOR MEXICANO JOSÉ MARÍA LUÉVANO.


“Me repugna ver que todavía hay personas, que se alegren de la muerte de otra persona”.

Hoy hemos visto en los medios de comunicación, que en la madrugada de este lunes ha fallecido el torero Mexicano, José María Luevano en un accidente de trafico tras empotrarse con la parte trasera de un tráiler y en ese mismo instante a salido ardiendo el todo terreno que el diestro conducía, el personalmente, quedando carbonizado en el instante.

El torero ha muerto con 37 años de edad, dejando a su mujer y tres hijos. Creo que ya es trágica dicha noticia, no solo por ser torero, sino por morir una persona más de tantas que hoy en día mueren en el cáncer silencioso de las carreteras. Como nos podemos dar cuenta he empezado contando esta noticia con un punto de impotencia, no podemos permitir bajo ningún concepto que por ser esta persona torero, otros que se hacen llamar anti taurinos, se alegren de esta noticia.

Sé que no son todos los antis los que se columpian en la alegría que le ha conllevado al enterarse de la noticia de la muerte de este torero. Pero si es cierto que en muchos medios de comunicación han derrochado muchos de ellos sus alegrías, a la hora de escribir sus comentarios, diciendo que ha muerto un asesino.

Tan solo quiero destacar y decir bien alto, que toda persona que se alegre de la
muerte de otra, sea este el motivo que sea su muerte, esta no es digna del merecimiento de la vida. No podemos permitirnos la ciudadanía de alabar la ignorancia de esta gente, no se merecen de nuestro respeto, ¿o es que hay algo más sagrado que la vida propia de una persona?, pienso y creo que por encima de creencias, posturas, ideologías, etc., siempre estará el derecho del vivir, del respecto hacia las personas y sobre todo de la vida misma.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por éste escrito, la familia y amigos de áquel José María que fue un buen torero, amigo, esposo, pero sobre todo excelente padre, agradecemos que haya quien alce la voz para decir que no es ético alegrarse se una tragedia como ésta. Muchas gracias! Dios les bendiga.
Pedimos sus oraciones por su mujer y sus tres hijitos que apenas inician su vida. Un cálido abraso. Sara Chávez Baca