Gerardo Rivera, un novillero ya debutado con
caballos, piso el albero Castellariego para lidiar una novillada del Origen San
Coloma sin picar (de erales).
Este novillero anduvo por este coso en este mes
pasado de Agosto, fue herido en la bolsa escrotal por un novillo de Jiménez
Indarte, ni en aquella ocasión ni menos en esta, nos ha dicho nada que merezca
la pena este novillero Mexicano. Fuera de
gacho en sus dos faenas, cuatro aspavientos a las reses para provocar al público,
pero no se les vieron formas y menos ante un encaste que aun siendo importante
y novillos de importancia, pero con sus teclas que tocar.
Gerardo Rivera paso por Castellar sin pena ni
gloria, pero dejo huella de un des-toreo que no va con el momento actual.
Emilio Silvera, este ni que decir tiene que para
nada lo supo ver en toda la tarde. De
igual forma le salió en su primero un novillo de buena nota, pero en ningún momento
estuvo afianzado con el cornúpeta. En su
segundo Vis, este menos aun, ni quiso verlo, más cuando este novillo iba
desarrollando por ambos pitones, sobre todo cuando este novillero no le supo hacer
bien las cosas desde un principio. La
cuadrilla en este novillo anduvo perdida por las tinieblas de Maracay.
Sergio Montero dio clases magistrales de toreo de salón
con su único novillo que tuvo para lidiar, pues sus compañeros anunciaban dos
reses y este, tan solo una. El novillo fue noble pero con muchas teclas que
tocar, tuvo motor y muy exigente. El
novillero desde el principio de la faena lo supo someter y entender, lo más
importante para este animal, no dudarle, sentó las zapatillas en el albero y
llevando la embestida consintiendo al animal por donde este él quería ir, hasta
que Montero se hizo con este animal y dio pases de gusto, relajación, temple y sintiendo
el torero, pero lo más importante de esta faena, que estuvo firme y siempre con
la pata-palente cargando la suerte.
Resumiendo; la primera vez que se lidia este encaste
de Santa Coloma en Castellar (Jaén), bien presentados e importante
novillada. Faltaron novilleros excepto Sergio
Montero, la novillada totalmente por encima de Rivera y Silvera. Algo menos de media plaza en una tarde de
buena temperatura.
P.D. No se puede anunciar en los carteles a novilleros
o diestros para matar estos encastes cuando es más que sabido con anterioridad
que no están preparados o cualificados para ello. Falta de profesionalidad, no de los que hacen
el paseíllo ¡no!, sino de los que son responsables de montar estos espectáculos.
Un servidor no se esperaba ver esta novillada con el
cuajo y trapío que se presento para este coso taurino. Bien por la Ganadera.
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